Las diez de Sergio Massarotto

1- ¿Cómo fueron tus comienzos?

Empecé en esto a los quince o dieciséis años junto a mi hermano que se le dio por tocar la batería y a mí el bajo; también con amigos con los que compartíamos bandas y frecuentábamos recitales. Rápidamente nos acercamos con otros músicos locales y después ya estaba la maquinaria andando. 

 

2- ¿Quiénes te acompañan en el escenario?

Formo parte de la mejor banda del universo, Científico Loco; las pruebas está ahí: hay que escuchar el disco e irlos a ver en vivo. Después, en el plano solista voy solo con mi guitarra, mi equipo Fender y mis distorsiones, aunque probablemente arme en un futuro próximo una banda estable para esta faceta. 

 

3- ¿Quiénes fueron tus grupos modelo/referentes?

Eso va cambiando; aunque con el paso del tiempo los gustos se van asentando más. Pero a rigor de la propia historia personal no puedo dejar de nombrar a tres de los proyectos de Spinetta: Pescado Rabioso, Socios del Desierto e Invisible; Pez, Cienfuegos, Aznar, Queens Of The Stone Age, Eagles Of Death Metal, Jack White, Alberto Merlo, y los dos solistas internacionales más importantes de la Tierra: David Bowie y Elvis Presley. No se, podría nombrar mil; naturalmente, uno quisiera sonar como una mezcla de todo eso; después la realidad desmiente. Ahora Phillip Glass se está convirtiendo en un referente, hacia donde quiero ir y con quien quiero discutir. 

 

4- ¿Qué género musical tenes?

Si bien experimenté con muchos géneros yo creo que por formación, intuición y el sonido que voy buscando mi constelación es el rock; ya es rara la vez en que apague el pedal de distorsión.  Y en ese sentido relaciono algunas cosas, por ejemplo, creo que el canto y el folklore surero tiene una conexión no solo espiritual sino en su materialidad con el blues y el rock americano, y trato fragmentariamente de buscar esa conexión. Las lagunas, el Río Salado y la planicie pampena hacen espejo con el desierto o las orillas del Río Grande, allá arriba, en la árida y seductora California o en los territorios de lo que era el antiguo Virreinato de Nueva España. Bueno, como sea, puede ser un delirio mío, las ganas de poder conectar la ruralidad y lo concreto del blues con los rasgos también duros de canciones como las de Alberto Merlo.

 

5- ¿En qué lugares llegaste a actuar que jamás lo hubieras imaginado?

En la cancha del CFC cuando vino a la ciudad Divididos; en el mismo escenario que León Gieco. Al margen de eso, hace poco con los Cientificos en un escenario de Lomas del Mirador, cuando fui a enchufar la guitarra en el equipo, me vino el pensamiento “ah, la mierda, acá estamos otra vez”. Y ahí estábamos: enchufando, afinando, preparando platillos. Quiero decir, vas aprendiendo a no fijarte mucho en la envergadura de los lugares sino en el flujo, en darte cuenta que sostenés una actividad durante, no se, veinte años y seguís. Y ¿para qué? te puede decir alguien sin musa, esas hojas de cálculo de Excel andantes, y bueno, lo haces simplemente porque sos eso. 

 

6- ¿Tocaste con alguna celebridad? 

Ahí nombré dos, Divididos y León. Hay algunos más. 

 

7- ¿Cuál es el tu presente? 

Sacamos con Cientifico Loco un discazo que estamos defendiendo en vivo por todos lados; también estoy trabajando la parte solista. Dando clases, grabando, tocando seguido, solo, acompañado y acompañando. Por suerte con mucho trabajo. 

 

8- ¿Hay proyectos para el futuro, tienen algún material grabado?

Con Cientifico estamos diagramando un video clip y también preparando temas nuevos para un posible segundo material. Estoy en la pre-producción de otro material solista, haciendo los demos, eligiendo las canciones; y componiendo, además, estudios y obras de música un poco más académica que voy a dar a conocer -esperemos- pronto (algo ya mostré en las redes). 

 

9- ¿Qué significa la música para vos? 

Tengo dos o tres pasiones fuertes que no puedo dejar de hacer por más que quiera: hacer música, leer/escribir y jugar al futbol. Sin embargo la música es la que rige. Aprendí de Hemingway y Stephen King, mediado por mi amigo el escritor Juan Terranova –que merece mucho más de lo mucho que ha logrado- , que hay que hablar de lo que uno sabe y ya; entonces pienso, escribo y argumento para y desde la música. Ojo, no es una relación siempre color de rosa; a veces la odio, te estresas de planificar, conseguir lugares para tocar, administrar bien el tiempo y las tareas, los trabajos y los días. Los músicos tenemos un problema enorme con el tiempo; de arranque, trabajamos con el sonido y la melodía, que es una de las pruebas ofrecidas cotidianas y más complejas de que existe algo así como el paso del tiempo. Pero claro, prefiero quejarme de eso, hacerme el banana diciendo “i hate the music” que quejarme de que no me quedó otra que trabajar cargando medias reces o atendiendo un locutorio. En ese sentido soy un agradecido. Ah, cierto, bueno todo eso es la música. 

 

10- ¿Qué deseas transmitir con tus canciones?

Buena pregunta. Difícil. Pero si lo pienso y las miro medio hacia atrás algo que  busco es entenderme a mí mismo en cierto momento; mis razones, las de mi entorno, mi mundo circundante y dar una señal hacia los demás. Si conectamos, bienvenido sea, es complejo pero a veces se logra.