¡Ayudemos a la Ludoteca de Máximo Paz!

Se presentó en el Concejo Deliberante un proyecto para que los niños y adolescentes de Máximo Paz tengan un espacio de educación no formal. La ONG “Es Tiempo de Jugar” cuenta con el apoyo de la ONG “Techo”, que prometió construir una casa para este fin, por lo que sólo necesitan tener el terreno donde comenzar la obra.
 

El proyecto Ludoteca Comunitaria Resiliente surgió como culminación del diagnóstico situacional de la comunidad de Máximo Paz, partido de Cañuelas. Una comunidad que reclama espacios de arte y juego, ante el aumento de la violencia y adicciones en niños y jóvenes. 
 

Hasta ahora los voluntarios venían trabajando de forma "móvil", pero gracias a moverse sin parar, lograron el apoyo de la ONG "Techo", y consiguieron que el sueño de tener una casa donde realizar las actividades comience a ser real.
 

"En los últimos años, la población de Máximo Paz ha aumentado abruptamente, observándose múltiples asentamientos de familias que vivencian diversas problemáticas sociales", explican en el proyecto presentado en el HCD. "Nos encontramos frente a una realidad de listas de espera en los jardines de infantes y en las escuelas primarias. Las instituciones formales educativas se encuentran frente a la dificultad de abastecer la demanda".

Sumamos a la situación descripta el hecho de que son escasos los espacios recreativos y de arte. Aquellos que están en funcionamiento se encuentran concentrados en el centro de la localidad y son de difícil acceso para muchos niños que deben cruzar la ruta 205, las vías del ferrocarril y campos. Además de que muchas de las actividades implican un gasto económico que las familias no pueden afrontar”, agregan. 

Desde hace ocho años voluntarios de la ONG "Es Tiempo de Jugar" acompañan y colaboran con las madres y jóvenes de la comunidad, quienes son los responsables de llevar adelante el proyecto "Ludoteca Viajera" —proyecto premiado en 2012 por la empresa Petrobras—. A partir del mismo, los referentes comunitarios se capacitan para concretar jornadas de juego, recreación y arte, en los barrios e instituciones educativas de la comunidad.  Esto ha posibilitado dar apertura a un espacio físico que funcione diariamente como Ludoteca Comunitaria Resiliente. (Resiliencia: la capacidad que todos tenemos de enfrentar situaciones difíciles, superarlas y salir beneficiados).
 

Aseguran que las madres, como adultos responsables de sus hijos, han transitado un proceso de cambio y aprendizaje que hoy en día las impulsa a defender el derecho al juego como así también el desarrollo integral de los pequeños de su comunidad. Es a través del juego y los diversos lenguajes expresivos, se estimulan los factores resilientes que posibilitarán un desarrollo integral en el niño y la posibilidad de salir fortalecido frente a una situación de vulnerabilidad social. Ese es el eje central del proyecto que no sólo contempla a los niños como beneficiarios, sino que también a sus madres, siendo ellas claves en acompañar y fomentar en sus hijos procesos de aprendizaje desde el juego y la recreación. 
 

Consecuentemente el proyecto responde a la necesidad de espacios lúdicos que garanticen este derecho, concientizando a la sociedad civil como a los funcionarios públicos sobre su responsabilidad de acción frente a la vulnerabilidad de los derechos de niños y adolescentes.
 

La necesidad concreta es la de instalar un espacio comunitario para que las propuestas que hoy se realizan de forma móvil e itinerante sean continuas y además se logre atender las necesidades de las familias que asistan al lugar. La idea es que la ludoteca se abra diariamente en la zona de Máximo Paz Oeste por gente que está capacitada desde el juego y la recreación. Estas personas son referentes del barrio y conocedoras de cada una de las familias de la zona. Además recibirían el acompañamiento del equipo de profesionales de la ONG "Es Tiempo de Jugar" —Psicóloga social, Profesora en Ed. Inicial, Técnica en Minoridad en Familia, Pediatra— y la colaboración de voluntarios de la ONG italiana CESC PROJECT. 
 

La ONG "Techo" gestionó a través de su fábrica social la donación de una casa prefabricada para que sea utilizada como Ludoteca, y asumió el compromiso de capacitar a la comunidad y voluntarios para su construcción. Ante este panorama, se les presenta el desafío de procurar un LOTE en el cual asentar la Ludoteca.

Una de las sugerencias que tienen por parte de gente de la zona, es ubicarla en una porción de una plaza abandonada, a unas cuadras de la estación de ferrocarril. De esta manera, darían utilidad a ese espacio verde, lo cuidarían y beneficiarían a los niños y adolescentes. El objetivo general es fomentar la capacidad de enfrentar y sobreponerse a condiciones de vida adversas —resiliencia— de niños y niñas de las comunidades que viven en situación de pobreza y/o vulnerabilidad psicosocial, teniendo como herramienta el juego y el arte.
 

La idea de llegar al Concejo Deliberante fue que vieron imprescindible buscar el apoyo de los concejales votados por el pueblo, ya que no encontraron este apoyo en el Ejecutivo local. Son conscientes también de que el paso por el concejo daría esta difusión necesaria para sumar voluntades dentro del partido, activar el tema en las redes sociales y lograr que los funcionarios les den garantías para cumplir con los derechos de los niños, niñas y adolescentes.

"Quiero tiempo, pero tiempo no apurado; tiempo de jugar, que es el mejor". (María Elena Walsh)

 

 

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